Esta semana me reflejé entorno a una frase:
“La amistad es como la música: dos cuerdas del mismo tono vibrarán ambas, aunque solo estén tocando una.”
Conocer a las personas cansa.
O es que en realidad solo estamos negando lo que sabemos de ellos porque no nos convence.
Problemática que va más allá de la amistad y el amor, nos encuentra en cada momento de improvisto.
Yo no sabría decirles cuantos cálculos puedo realizar entorno a estos, pero si se que cada día tengo mas razones para no extrañarme de las rarezas que cometen.
Me incluyo. Eso es lo peor.
Probablemente haya sido el pensamiento del momento, quizás vuelva a olvidarme de esa sensación mañana, o la próxima semana. No creo que ese futuro pueda llegar a ser.
ResponderEliminarLa gente es rara, cuando crees que los conoces por completo y que descubriste todas las facetas de su personalidad, te sorprenden y no siempre de la mejor manera. Pero vale la pena conocerlos y poder clasificarlos en su debido grupo.