
Yo integro la parte paqueta de mi barrio,
"lo residencial",
donde lo mágico y tranfuga sucede,
y las reglas son pautadas por los malandras de buzo canguro.
Yo camino en calles de baldosas flojas y manchadas,
"antiguas",
donde los pasos y las palabras vulgares vuelan,
y la impaciencia aumenta, crece con cada mirada.
Yo respiro oxígeno con átomos lisergicos,
"olor asfalto",
donde el aroma del plástico ensuciado abunda,
y mi costumbre se afianza.
Yo soy parte del pedazo de mierda,
y tengo frio en las manos (me falta un guante negro que se perdió por la gaveta),
y tengo molestias constantes, tal como vivir aterrada.
¿Soluciones?